Mucho Ruso En Rusia. Parte I

Vuelta al trabajo después de 7 días de aventuras en Moscú y Berlín, la cosa transcurrió de la siguiente manera.

Debido a la falta de músicos para completar el grupo no hubo actuación alguna, pero viendo el caracter de los rusos segúro que lo mismo les habría dado.

Tras conseguir los visados, pagando 80€ del ala cada uno, un par de viajes a la embajada y un seguro médico, ya estabamos preparados para el viaje.

Salimos para Colonia el sabado 3 de Diciembre allí nos acogieron muy amablemente amigos de Xurde y Natalia, muchas gracias ! . Luego domingo por la mañana teníamos el vuelo para Moscú.




Patinado sobre el hielo que cubría todo el aeropuerto aterrizó nuestro comandante y luego los amables moscovitas nos tuvieron largo tiempo mirando y vuelta a mirar el pasaporte hasta que ya pudimos entrar a Moscú, cambiamos rublos y al buseto municipal que nos llevaría al centro.



Todo parecía fácil, bus, metro, y sin pérdida nos plantamos en la estación cerca de nuestro hogar moscovita. Nos acostumbramos pronto a lidiar con los empujones de la gente, el riesgo que suponían las puertas-guillotina. Curioso era también los tornos para entrar, no se veía ni puerta ni obstáculo, pero si pasabas sin pagar salían unos hierros directos a la espinilla para que aprendieras por las malas a pagar en el metro.




Salimos ya del metro , todo muy chulo, luz, color, miles de casinos y puestos de cambio por las calles, casetas que venden comidas variadas, bares, un paraiso vamos.
Pero todavía nos hace falta encontrar a Jose , nuestro anfitrión, tarea baladí, teniendo en cuenta que teníamos la dirección apuntada, sus teléfonos, y la casa no estaba a más de 100m, de la estación de metro.
Pero pronto se vio que la cosa no iba a ser fácil, un ruso tras otro pasaban de nosotros o no sabían inglés o lo que fuera. Otra cosa era que allí tampoco se marcaba el teléfono como aquí, nada de 00 + codigo pais ... que va, 018 o no se que, así que hasta que no apareció un ruso majo que sabía inglés y nos dejó llamar desde su móvil estuvimos a punto de recurrir a la caridad rusa, que será cero, supongo.

En cuanto vino Jose subimos a su casa, todo lujo, al lado del metro y bien caliente. Dejamos los bártulos y nos fuimos a ver Moscú, ya teníamos todos nuestro ticket de 10 viajes, que conseguimos tras insistir por señas, alguna vez ni así, cuatro voces y fuera de la taquilla.



Salimos en la parada de la Plaza de la Revolución, por allí estaba el Bolsoi en obras, y a la vuela la Plaza Roja, impresionante de noche y también de día. Como no ahorran en luces está toda la noche casi como si fuera de día.

Luego nos fuimos a un garito muy chulo, donde conocimos a unas chicas vascas muy majas que nos enseñaron que cosas pedir de comer y sitios para ir, pero claro esto fue después de que nosotros pidiéramos nuestra cena. No había carta en inglés y la camarera intentó durante 0.5 segundos entender nuestras señas, así que 4 sanwis de pepino con patatas, y otras 2 raciones de patatas más por nuestra cara bonita. Ya teníamos asumido que lo de hacernos entender imposible, así que nada a pedir y que nos traigan lo que quieran, menos mal que para pedir cervezas no hubo problemas.



Después de la cena volvimos a ver más de cerca la Plaza Roja.
La catedral de San Basilio que parece una falla, es grande y el Kremlim gigante. El mausoleo de Lenin no tan espectacular como esperaba, por fuera, por dentro, que lo cuenten los que entraron... :(





Luego sigo con más fotos de la mañana siguiente ya de día y con el irlandés de nuestro barrio, mercado de Ismailovich, la universidad y aventuras sin par...

Lujoso Reportaje Fotográfico de Xurde

Saludos a todos !
Ismael.